Entre Ríos se quedo sin su embajador, falleció ALBERTO ARGüELLO en la madrugada del domingo 21 de octubre del corriente. Corazón y sentimiento entrerriano, en su voz se hicieron eco miles de anónimos que iban dibujando el protagonismo que con su pluma y su voz cobraban el protagonismo de sus vidas. Nacido en Concepción del Uruguay, Entre Ríos, Alberto fue creciendo en familia, y de muy joven junto a ella vinieron a Buenos Aires. El descubrió el canto en tierra Bonaerense, porque el contaba que estando en su pueblo no lo hacía, el desarraigo lo hizo descubrir su talento. En, encuentro con amigos, los fogones en Valeria del Mar, provincia de Buenos Aires, allí primero descubrió la guitarra, llave que logro abrir al hombre compositor. Fue una señora amiga y seguidora, Pochi García de los pagos del Barrio de Paternal, Bs. As., quien lo bautizo EMBAJADOR ENTRERRIANO, fue recién en su cuarto trabajo discográfico cuando aparece la imposición de este que sería por siempre su presentación artística. El enero de 1973, le dio tal vez el mayor de los créditos que un folklorista espera lograr, Cosquín lo coronaba revelación de esa edición. Alberto, fue un hombre sencillo, humilde, el no dudaba en mostrar la desnudez de su alma en el brillo de sus ojos, era muy común verlo emocionado hasta las lagrimas al solo sentir un acorde que lo envolvía y lo transportaba a su pago. Un artista que jamás dejo de trabajar, pues el no vivía de su canto, como cualquier argentino, acudía a su tarea laboral, y al terminar su jornal, se vestía con sus galas para contar y cantar su historia entre Chamarritas, Rasguido Doble, Chámame y Chamarras. Esto que muchos no entendían tal vez muestra una parte tan genial como lo fue su vida misma, siempre él decía, que su padre al verlo cantor, serio le dijo: “¡Alberto!…Empezaste a cantar y andar con la guitarra en la noche….Alberto….primero el trabajo” Para Argüello, el canto era disfrutar, era encontrarse con los amigos, compartir con ellos, y allí dejar el corazón… (fuente Javier Zárate, EERR)
Murió el percusionista Rodolfo Sánchez y dejó un vacío en el pulso de la música popular. Considerado uno de los músicos más dúctiles de los últimos tiempos, Sánchez acompañó por décadas a Raúl Carnota, con quien desde 2008 también compartió el notable trío Proyecto SanLuCa, también integrado por el armoniquista Franco Luciani.
Al expresar en 2009 lo que le generaba la experiencia del terceto que acaba de publicar su primer (y hasta ahora único) cd, Sánchez dijo que "hacer esto es un privilegio porque coincidimos tanto en la manera de sentir y tocar que hay ciertas cosas que ni siquiera se han hablado". “Con SanLuCa apareció la verdadera parrilla que se da naturalmente y que nos provoca un alegrón", sintetizó el músico acerca de ese encuentro para abordar un repertorio integrado, entre otras piezas, por "Viene clareando", "Rumbo al algodón", "Ña Polí o la pureza de la gente como usted", "Chacarera del pensador", "Sur", "Postales", "Mensaje" y "Dónde...?".
Pero además supo poner su toque en trabajos de grandes intérpretes como Mercedes Sosa, Teresa Parodi, Eduardo Lagos, Juan Falú, Popi Spatocco, Eduardo Spinassi, Willy González, Manolo Juárez y Lilian Saba, entre otros.
Juan Martín Medina ex integrante de la banda de Cuti y Roberto Carabajal, Los Nocheros, Peteco Carabajal, creador junto al cantautor tucumano Yuca Córdoba del proyecto musical La Ira de Atahualpa y actual músico de la cantante mexicana Julieta Venegas, manifestó que "todos los músicos de folclore de mi generación en adelante estuvimos marcados por la manera de tocar que nos regaló Rodolfo”.
Medina sostuvo que “Sánchez, junto a Raúl Carnota y el maestro Eduardo Spinassi, son esos tipos dueños de la magia de hacer que tu discurso crezca cuando estás tocando con ellos y que te salgan cosas que jamás te hubieras imaginado solo y estoy seguro que se lo va a extrañar mucho". El armoniquista Franco Luciani, uno de los tres SanLuCa, expresó a esta agencia que "Rodolfo fue un profesor para mí porque mis comienzos fueron con la percusión y después me dediqué a la armónica. Me formé con su música desde mi viejo que me mostró esos discos de Carnota, de Spinazzi".
"La vida me dio el enorme gusto de participar de un terceto con él, de viajar al exterior y era un músico especial, no sólo por la forma de tocar sino también por como era sobre el escenario. Es un día muy triste porque te queda la bronca de que nos podría haber dado mucho mas", agregó. Spinazzi dijo que Sánchez "quizá no haya tenido el reconocimiento que se mereció porque éste es un país de cantantes o guitarristas que trascienden más que los músicos, pero su obra en diferentes formaciones siempre será un ejemplo para los músicos más variados".(fuente: Telam)