Cumpliendo la promesa de acompañar a su amigo y coterráneo el humorista Eduardo “Cacho” Buenaventura subió al escenario a compartir chistes, cuentos, anécdotas y el aplauso del público.Jairo no se privó de nada: su hermano Jorge acompañado por el guitarrista Cololo Macedo,
temas en francés con su hijo en teclados,
las baladas que fueron éxitos en los años 80 y el final con el público de pie y en el más absoluto de los silencios para escuchar un vibrante Ave María a capella y sin micrófono.
Si había dudas por la condición de su voz y por el seguimiento y fidelidad de su público, éstas quedaron despejadas: una plaza llena, vivando y aplaudiendo sirve de referencia